Durante el estudio etnográfico “Experiencias maternas de mujeres embarazadas en los Altos de Chiapas” se observaron dos resultados principales respecto a la autonomía de las mujeres: 1) que no está determinada por las formas de medicalización y 2) que no es absoluta, sino gradual. Los escenarios de las experiencias maternas son complejos y no hay solo una ruta de atención ya que, por ejemplo, una mujer primigesta puede tener las mismas complicaciones biológicas que una mujer multigesta. Dada esta complejidad, considerar los diferentes elementos de vulnerabilidad e intencionalidad de los actores presentes en tales experiencias permite reconocer los diversos escenarios en que la mujer puede estar en riesgo, no solo por sus condiciones biológicas.

El objetivo de esta investigación es describir y analizar las representaciones de las mujeres de los Altos de Chiapas de las diversas formas de medicalización del embarazo, el parto y el puerperio, y las prácticas al respecto. Se trata de un estudio longitudinal que dio seguimiento a diez mujeres embarazadas durante más de un año, hasta al menos cuarenta días después del parto. Los ejes de análisis son la medicalización y la autonomía de la mujer durante la maternidad. El estudio retoma los aportes de Foucault sobre la naturalización de las prácticas de poder del saber médico para tener una visión sistemática del problema. Por ello, se introdujo el concepto de autonomía desde la biomedicina, lo que permitió explorar el peso de las decisiones de la mujer de acuerdo con su intencionalidad, y la de los actores que la rodean, quienes pueden llegar a influir en su maternidad más que ella misma. También se analiza la experiencia de todos estos actores con respecto a la maternidad, y cómo interviene la posición de vulnerabilidad social, biológica y psicológica de la mujer